DEL GRUPO DE INTELIGENCIA EMOCIONAL

LA VIDA ES BONITA

Mi primer contacto con el Teléfono de la Esperanza fué por curiosidad. Por saber de qué íba aquello...

Quizás por buscar algún tipo de respuesta que me ayudase a conducir mi vida.

A día de hoy tengo que decir que estoy feliz. Por todo lo que ahora sé sobre mí, porque me conozco más y porque he aprendido a llevarme un poquito mejor conmigo.

Por todo lo que me han enseñado sobre las personas, los sentimientos y sobre la vida.

Ahora tengo más claro que se puede cambiar el rumbo, si uno quiere.

Yo sabía que era débil emocionalmente y gracias a mi grupo de INTELIGENCIA EMOCIONAL, gracias a mis compañeros, he salido fortalecida.

He conocido gente llena de bondad, personas maravillosas que demuestran que la vida es bonita.

Por eso nunca me cansaré de recomendar que se acuda al Teléfono. Porque es un auténtico bálsamo para el alma, gratificante en todos los sentidos.

Beatriz Rodríguez García