Hoy nos dejamos conducir por Ana Gimeno Bayón, licenciada en derecho y psicoterapeuta integradora humanista.
Las despedidas forman parte de nuestro recorrido como seres humanos en proceso, en el que nos encontramos con encuentros y pérdidas. Despedirse no es tarea fácil. Casi siempre implica tristeza, dolor, rabia, ansiedad, vacío.
Hay pérdidas personales – suelen ser las más dolorosas- y pérdidas materiales (empleo, bienes..).
Formas insanas de despedirse:
1ª. La pataleta: ¡No quiero, no quiero , no quiero!. El niño grita, patalea, pero no puede evitar el adiós, pero su rabia le impide aceptarlo.
2ª. La mariposa disecada: nos negamos a aceptar lo ocurrido y “disecamos” la historia pasada. Ej. Se muere un ser querido y dejamos su habitación tal y como la dejó o le hacemos un santuario.
3ª. El agujero del queso. Convertimos nuestra vida en un queso lleno de agujeros, de vacíos, de soledades, hasta alcanzar la depresión.
4ª. El rico paralítico. El niño considera que todos sus juguetes son suyos y no deja compartirlos con los demás. Al final se quedará solo.
5ª.- La despedida del chicle. Hacemos de las despedidas una goma que se estira y se estira, pero nunca rompemos, nunca decimos adiós.
6ª.- ¡No pasa ná!. Es la persona que niega la evidencia. Niega la pérdida, creyendo que así niega el dolor.
Formas sanas de despedirse:
a. Valora los regalos de la vida, aunque tengan taras, aunque tengas que soltarlos y dejarlos irse.
b. Descubre cuándo es el momento de despedirse, sin precipitación y sin demora.
c. Acepta todas las emociones que el proceso de despedida conlleva, aunque sean negativas.
d. Trata de cerrar los asuntos pendientes, antes de que sea demasiado tarde.
e. Quítale valor al “tener” y pon tu pasión en el “ser”.
f. Acepta la herencia que la despedida te deje, sea cual sea.
g. Celebra tu ritual de despedida. Todas las civilizaciones tienen ritos de despedida para digerir la pérdida, la ausencia, el adiós.
h. Date tiempo para cicatrizar tu herida y déjate buscar, encontrar, nuevamente por las vida, que tiene sorpresas agradables. No todo terminó.
Amigo/a bloguero/a: ¿Cuáles son tus pérdidas?. ¿Qué te ayudó en las despedidas?. Deja tu palabra en “comentarios”.